¿Qué es un modelo Freemium?

El término “freemium” acuñado por Jared Lukin es el resultado de la combinación de los dos aspectos que definen el modelo comercial: “free” y “premium”.

Este modelo de negocio consiste en ofrecer de forma gratuita una parte básica del servicio o producto, con la opción de poder escalar a un servicio avanzado con acceso a las características y funcionalidades avanzadas, previo pago de una tarifa o cuota mensual.

¿Cuáles son sus actividades, recursos, socios, costos y flujo?

Consiste en tener una gran masa de usuarios que consuma el producto y/o servicio de forma gratuita y unos pocos clientes de pago que sustentan al resto, esto para que el modelo freemium funcione.

Puede resultar muy costoso ya que a pesar de ofrecer un servicio gratuito debe ser de calidad para poder captar usuarios y convertir a estos usuarios “free” en usuarios  “Premium”; es decir, debes captar a un gran número de usuarios de manera gratuita y convertir a un número importante de estos usuarios en usuario de pago, para que tu negocio sea rentable.

Algunos puntos a tomar en cuenta son:

Exploración: hay que explorar nuevos grupos de usuarios, sí, pero sobre todo hay que vender. La mejor estrategia de exploración es la venta de los contenidos. En este sentido, la propuesta de valor debe ser lo suficientemente potente como para generar interés en esos potenciales clientes.

Valor: ofrecer una parte del producto de forma gratuita no garantiza atraer a muchos usuarios, por lo que el contenido debe ser de valor para el público y establecer de manera clara la línea entre el free y el Premium para que al usuario le sea atractiva la opción de paga.

Volúmen y Viralidad: entre mayor sea su radio de acción, más posibilidades de atraer a más usuario mejor.

Precio: La clave se resume en el valor de los contenidos freemium, estos deben ser suficientes para subvencionar a los usuarios free y, a la vez, cubrir los gastos generales de la empresa.

Coste del servicio: otra de las claves para el éxito de los negocios freemium radica en el escaso incremento de costos. Cada usuario que acceda a los contenidos no debe suponer ningún incremento en tus gastos.

Mercado: los negocios freemium están pensados para mercados grandes, pues del alto volumen depende, en gran medida, su sostenibilidad.

Existen varias formas de limitar la parte gratuita para conseguir que el usuario llegue a pagar por la cuenta premium como por ejemplo:

Límite de funcionalidad o capacidad: Las funciones más avanzadas llevan asociados un pago.

Límite de tiempo: Se ofrece una cuenta gratuita durante un primer periodo de tiempo y si al usuario le gusta, pagará por ella.

Límite por uso: Se ofrece una licencia gratuita pero si es necesario adquirir más, habrá que pagar por ellas. Esto suele suceder en las licencias de algunos software.

Por publicidad: Si el usuario no quiere ver y/o escuchar publicidad mientras disfruta del servicio, deberás adquirir la cuenta premium.

Un ejemplo de este modelo es Spotify, la plataforma de reproducción de música vía streaming comenzó como un servicio completamente gratuito libre de cargas y de publicidad.

A medida que el volumen de usuarios registrados fue creciendo, la plataforma incorporó publicidad y limitó el número de reproducciones por canción para la cuenta gratuita. La cuenta Spotify Premium ofrece la reproducción ilimitada libre de publicidad previo pago de una cuota mensual.

Existen muchos ejemplos con este modelo de negocio, pues es muy atractivo y podría decirse que simple, sin embargo requiere de tiempo, constancia y tener muy clara la la propuesta de valor para convertir a tus usuarios “free” en usuarios “premium”.