Una marca es la combinación, por ejemplo, de signos, letras, colores, vocablos, figuras o símbolos que se utilizan para distinguir productos o servicios.
Definir una marca para tu negocio es la forma más eficaz de mostrar a los potenciales clientes de qué se trata tu empresa; define tu identidad y te diferencia de tu competencia.
Esta se refleja visualmente a través del logotipo y los elementos de diseño que la acompañan, así como a través de las palabras usadas como son eslóganes y textos informativos. Según la revista Fast Company, “La marca es una promesa de la valoración que recibirás”.
Una marca permite una identidad inequívoca para tus productos o servicios, lo que te dará la posibilidad de diferenciarlos y posicionarlos en el mercado.
Su protección es de suma importancia para poder defenderte frente a terceros que utilicen nombres, textos, denominaciones o signos que pudieran entrar en conflicto con tu marca registrada.
El que un tercero utilice tu marca (o similar) puede generar confusión en tus clientes, lo que puede significar una perdida de ganancias.
Dada su importancia, ahora en nuestro país está la posibilidad de oponerse a una solicitud de registro.
Sistema de oposición de marcas
Permite a cualquier persona oponerse a una solicitud de registro de marca, aviso o nombre comercial, por considerar que incurre en alguno de los impedimentos que señala la Ley de la Propiedad Industrial.
Con el nuevo sistema de oposición, cualquier persona podrá intervenir en el procedimiento y podrá solicitar al IMPI que no conceda el registro de una marca por considerar que es contraria a la moral o a los buenos usos y costumbres, o por cualquiera de las fracciones del artículo 90 de la Ley de la Propiedad Industrial.
En México todo trámite relacionado con el registro de marcas es responsabilidad del Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI).
